Cuenta la gente que hace muchos años existió un tractor que tenía vida propia.
Todo el pueblo estaba asustado. Una noche salió el tractor, encendió sus faros, enganchó su arado y puso en marcha su motor. Arrasó el trigo y mató al dueño que intentó impedírselo.
Desde aquella noche ya no se supo más de aquel tractor fantasma.
Tractorista